El ascenso del FMLN al legislativo
Contrapunto 02-Febrero-2011

Sigfrido Reyes promete luchar contra la corrupción y por el beneficio nacional gestión legislativa

Era temprano aún, antes de las 9:30 am, pero ya no había espacio en los parqueos de la Asamblea Legislativa, abarrotados por los vehículos de los funcionarios habituales y de los invitados especiales que no se querían perder el traspaso de poderes de la derecha a la izquierda, como signo de los nuevos tiempos que afectan a El Salvador.


El diputado Sigfrido Reyes, que asumió este martes la presidencia del llamado primer órgano del Estado y será el primer político de izquierda que dirigirá durante año y medio sus destinos.

Reyes es uno de los principales dirigentes del ahora oficialista y ex guerrillero Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) y se ha desempeñado como vicepresidente del Parlamento desde el 1 de mayo del año pasado.

En algunos sectores empresariales, sociales y políticos se le considera “ortodoxo” por provenir de las filas del extinto Partido Comunista, pero en su discurso de aceptación del nuevo cargo dedicó a “Dios y a su familia” el nuevo rol que desde ahora asumirá en la política.

Quizás su pasado ejercicio como jefe de comunicaciones del FMLN lo provocó a dar declaraciones que parecían “machete desenvainado”, pero él asegura ser “moderado y tolerante”.

El diputado izquierdista debía asumir la presidencia del Parlamento en mayo del año pasado, ya que el FMLN había ganado la fracción mayoritaria en las elecciones de enero de 2009, pero la derecha, en una maniobra, logró reelegir al diputado Ciro Cruz Zepeda para un quinto período de tres años consecutivos.

De acuerdo al reglamento legislativo salvadoreño, el partido con mayor número de diputados es el llamado a designar al “caudillo” del órgano del Estado, pero desde 2003 el FMLN fue bloqueado por las fuerzas derechistas que encabezaron el ex oficialista Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), que mantenía la hegemonía desde 1989 hasta 2009, cuando perdió el gobierno en elecciones presidenciales frente al FMLN.

En los meses de mayo de 2003, 2006 y 2009 ARENA siempre se imponía y bloqueaba el ascenso del FMLN a la presidencia del Parlamento, pero el año pasado ARENA se dividió en dos bloques tras su fracaso presidencial en las elecciones de marzo de 2009.

La división de la derecha "arenera" y el surgimiento de GANA permitió nuevas negociaciones y que se modificara el reglamento legislativo para que el FMLN tomara la presidencia en la segunda mitad del actual periodo legislativo, que termina el 30 de abril de 2012.

Sigfrido Reyes, en acto solemne y frente a los presidentes de la República y de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Mauricio Funes y Belarmino Jaime, respectivamente, rindió homenajes a todos aquellos que lucharon contra la dictadura y por una verdadera democracia en El Salvador.

Nunca un presidente del Legislativo había homenajeado, como este martes lo hizo Reyes, al indígena Anastasio Aquino, a Farabundo Martí, al arzobispo Oscar Romero y al recién fallecido líder comunista Schafik Handal.

Igualmente declamó parte de un poema de Roque Dalton, asesinado en 1975 por una facción extremista de izquierda, con el que ejemplificó la historia vivida por los salvadoreños después de la masacre indígena y campesina de 1932, con la que se inaugura el período de dictadura militar.

En su discurso de aceptación del cargo, el diputado Reyes prometió combatir la corrupción y aseguró que su presidencia será transparente. Enfatizó mucho en la necesidad de que los diputados, el parlamento y los partidos políticos recobren credibilidad por el bien de la democracia local

Dijo también que mantendrá "estrechas" relaciones con el gobierno de Mauricio Funes, a quien llamó “nuestro presidente”.

Reyes fue aplaudido, ovacionado. En las gradas donde estaban la mayoría de los invitados se escucharon gritos de “¡Si se pudo!, ¡Si se pudo!” y “¡El pueblo unido jamás será vencido!”

Mientras, como despedida, desde lo alto del estrado también le gritaban a Ciro Cruz Zepeda: “¡Mentiroso!” y “¡Corrupto!”… pero el diputado del Conciliación Nacional (PCN), ni se inmutó, quizás no escuchó.